En estos últimos días del Adviento contemplamos
en la liturgia a la Virgen María
en diferentes momentos antes del nacimiento de
Jesús:
en la Encarnación, en el canto del Magníficat…
y hoy, IV domingo de
Adviento, el pasaje evangélico narra su visita a Isabel.
No movía a María la curiosidad por
conocer si era verdad
el milagro que le había anunciado el ángel,
sino el deseo
de servirle, de ayudarle
y también el deseo de anunciarle y transmitirle
la
buena noticia de la que Ella era portadora.
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